HOY QUIERO ROMPER UNA LANZA POR LOS REYES DE ESPAÑA
“Todas las Artes producen cosas
maravillosas excepto el Arte de gobernar que solo produce monstruos”
Terminado el trapo rojo en el ruedo
nacional para entretener al personal con el traslado de los restos de Franco al
cementerio del Pardo, lo único notable pero absolutamente innecesario que este
Gobierno de indeseables ha hecho hasta el momento, - en todo el resto de la
acción de gobierno han sido y son un total desastre-, y necesitando
desesperadamente distraer la atención pública de los resultados de la pandemia
que hemos/estamos sufriendo, "la peor situación posible con el peor
Gobierno posible", que por la incompetencia de estos nefastos e inmorales
iletrados nos han colocado en primera posición como el país del mundo, ¡del
mundo!, en muertos por millón de habitantes e igual posición en
contagios porcentuales entre el personal sanitario.
Tenemos hasta el momento 40.000 muertos de los cuales más de la mitad, unos 25.000, son de responsabilidad directa, culposa y dolosa del Gobierno de la Nación, que algún día será juzgado por su negligente actuación, si a este país le queda algún resto de decencia y dignidad en la clase política, policial y jurídica. Pero creo que no tenemos ya ni ni memoria ni decencia ni dignidad a nivel nacional. Felicidades. Como las criadas sucias están escondiendo a los muertos debajo de las alfombras. Pero eso no es fácil. Son demasiados. Y tenemos un futuro negro, pero negro negro, la crisis económica producirá más muertos que la pandemia.
Tenemos hasta el momento 40.000 muertos de los cuales más de la mitad, unos 25.000, son de responsabilidad directa, culposa y dolosa del Gobierno de la Nación, que algún día será juzgado por su negligente actuación, si a este país le queda algún resto de decencia y dignidad en la clase política, policial y jurídica. Pero creo que no tenemos ya ni ni memoria ni decencia ni dignidad a nivel nacional. Felicidades. Como las criadas sucias están escondiendo a los muertos debajo de las alfombras. Pero eso no es fácil. Son demasiados. Y tenemos un futuro negro, pero negro negro, la crisis económica producirá más muertos que la pandemia.
¿Qué hacemos ahora para distraer a la opinión pública, para que no pidan nuestras cabezas por los miles de muertos que hemos ocasionado, por la ruina de la economía, por los millones de españoles que se quedarán sin empleo, por los tiempos de miseria y desolación hacia donde vamos conducidos por estos incompetentes?
¿Qué hacemos? Es nuestro cuello lo que está en juego. ¿Nos jugamos cadena perpetua bien merecida, ganada a pulso, para todo el Gobierno en pleno?, ¡Eureka!, ¡ya está! ¡Que listos somos!, la única Institución del Estado que estaba sin joder, la única ejemplar, vamos a por ella: La Monarquía.
Tenemos espectáculo garantizado, para este pueblo sin memoria, para esta opinión pública a la que el siguiente escándalo, el de cada día, hace olvidar al anterior en una cadena sinfín de degradación democrática y moral, para este periodismo que se deja torear de salón por el Gobierno como si fuesen toritos amaestrados, o son matarifes a sueldo de su única ética: el dinero, para una ciudadanía a la que estafan cada día y que además a la mayoría parece no importarle, aun cuando sea su propia ruina y enterrar a sus padres en abandono y soledad, una sociedad que en estos tiempos de cultura generalizada parece que se ha decidido por abrazar la ignorancia como cultura política, olvidando el lúcido pensamiento de Jefferson de que "Si un pueblo pretende ser ignorante y libre al mismo tiempo, pretende algo que no se ha conseguido ni se conseguirá jamás".
Y así vamos tirando, en esta España de mis dolores donde "De diez cabezas nueve/ embisten y una piensa. A. Machado", y donde la única explicación posible para el gobierno que padecemos es que el votante español vota con los cojones, con la misma pasión ciega con la que se sigue a un equipo de futbol y nadie con la cabeza, sin entender que una buena parte de nuestra felicidad y prosperidad descansa en la sabia elección de nuestros dirigentes, y aquí eso ni lo pensamos siquiera, lo mismo da, son los nuestros y con ellos hasta la ruina y la muerte, una y otra vez, y tal como Montaigne observó ya hace siglos sin que políticamente hayamos mejorado ni siquiera un paso "En estos tiempos he visto maravillas en cuanto a la insensata y prodigiosa facilidad de los pueblos para dejar arrastrar y manejar su creencia y esperanza allí donde ha complacido y servido a sus jefes, por encima de cien errores, unos tras otros, por encima de fantasmas y sueños, por encima de la realidad. No me sorprende ya de aquellos a quienes engañan las sandeces, su juicio y entendimiento está por completo ahogado en su pasión partidista”, en esta España, hoy, donde parece que no hay límite de degradación intelectual y moral, ni corrupción que no esté dispuesta a admitir y a tolerar. Confucio nos dejó dicho que "La sociedades como los peces empiezan a pudrirse por la cabeza", bien a la vista lo tenemos. Solo una sociedad muy enferma puede tener el Gobierno que tenemos.
Vale, pues hablemos de la Monarquía española, queridos y despreciables malandrines de la clase política. Y comienzo por una confesión, es Julio, hace calor, me aburrís hasta el agotamiento, sois tan simples como los que consideran el aro como alta tecnología, totalmente previsibles, solo aire, maldad, vanidad y ambición, por tanto voy a trabajar poco, iré sacando de mi obra Humanitas et Universalitas, algunos párrafos y citas que vea apropiadas a la intención de mi discurso. Vamos a ello.
Y quiero atestiguar que desde muy joven, y soy ya muy viejo ya, he
tenido la firme convicción de que los países no necesitan padres, necesitan
Instituciones fuertes y bien regladas, pero claro, como era muy joven, no saqué el corolario evidente,
y es que las Instituciones están manejadas por hombres y que las Instituciones
al fin tendrán como valor social exactamente lo que valgan los hombres que las
manejan. En el caso español cero, ya que no existe Institución del Estado que
no esté emputecida y degradada por los dirigentes políticos que tenemos.
Y la gran cuestión: Monarquía o República. Parece
fuera de toda duda que los hombres deben de gobernarse por sí mismos y que la
máxima autoridad de un Estado debe de serlo por elección y no por herencia, ya
que si el talento, el buen juicio y la bondad con el pueblo fuesen hereditarios
sin duda la monarquía sería un buen sistema, incluso aunque fuese un talento
mediocre, ya que un árbitro social no comprometido con ningún partido y
altamente preparado desde la infancia en esa función es siempre un bien social
de valor incalculable para serenar las siempre tempestuosas aguas sociales. Platón decía que "si los hombres fuesen virtuosos pelearían por no gobernar como hoy lo hacen por gobernar".
Pero en la
realidad de Europa, -y ejemplo del mundo-, los países más estables y avanzados
socialmente son monarquías parlamentarias donde el Rey reina -arbitra- pero no
gobierna, -“Rex regnat et non gubernat. J. Zamoyski”-, y es un lazo de unión social
tan importante como la bandera nacional o el concepto sublimado de la Patria,
su encarnación. Y Alemania, otro ejemplo de buen gobierno.
Y la
República, cumbre máxima del pensamiento político desde Roma –“El Hombre ha nacido para
gobernarse a sí mismo y no para que le gobiernen sin su consentimiento” "Ningún hombre es suficientemente bueno para gobernar a otro sin su consentimiento. Lincoln"- tiene
un problema fundamental visto lo que se ve en el mundo, el tipo de necios e
indocumentados que pueden llegar al poder no por elección de toda la
sociedad, solo por parte, en el mejor de
los casos de la mitad de la sociedad, la que le ha votado y que siempre tendrá
la tendencia y el compromiso de gobernar para sus votantes y no para toda la
sociedad, muchas veces contra la mitad de la sociedad, y mientras la calidad y
el juicio de los votantes es el que es y en consecuencia se ve lo que se ve en
la pretendida máxima dignidad del gobierno de las sociedades, da pie a que un
burlón poeta satírico defina así a la República, olvidando, a propósito, que
etimológicamente proviene de Res-cosa-Pública: “Si pública es la mujer/ a la
que llamamos puta/ república debe ser/ la mujer más disoluta/ y siguiendo la
razón/ de esta lógica absoluta/ todo aquel que se reputa/ ser de república
hijo/ ha de ser, a punto fijo/ un hijo de la gran puta. Clímaco Soto”. En la España actual acierta de pleno.
Históricamente la estabilidad política y jurídica, y
la paz social incluso en semilibertad, siempre producen el desarrollo y la prosperidad,
incluso con malos gobiernos. O casi sin gobierno, como Italia en largos
periodos o en España en la Dictadura o en China hoy. Y sucede exactamente lo contrario con la discordia social permanente: ruina segura. En esto estamos en España. Aun cuando tengamos que
recordar para cualquier sociedad, para todas, el dolorido y anhelante verso
medieval del Poema del mío Cid, que sirve para cualquier sociedad humana “!Dios
que buen vassalo! ¡Si oviesse buen señor!”, si, sí algún día tuviésemos un buen
Gobierno para todos los hombres.
Pero hablamos de España, yo he nacido y vivido a la
sombra de este pesimista y acertado verso y me vienen a la cabeza dos citas también pesimistas
pero burlonas sobre nuestra Nación y nuestra política que un poeta satírico la
definió así “Política, arte ramplón,/ que se aprende mal y pronto/ y en la
española nación/ es constante ocupación/ de algún sabio y muchos tontos. M.
Palacios”, pero exageraba el coñón no se ve ningún sabio en la política
española, y es el mismo que burla, burlando, se mostraba maravillado por la
duración de siglos del imperio español gobernado siempre por monjas, necios y
bribones, ya que como bien definió Von Bismarck “España es la Nación más fuerte
del mundo ya que llevan siglos intentando destruirse y nunca lo consiguen del
todo. El día que decidan caminar juntos estarán en la cabeza del mundo”. Pero este pensamiento sirve para todo el mundo. El día que el mundo decida caminar junto estaremos en el gran proyecto de la dignidad humana, la evidencia de que somos solo una Humanidad y somos solo un mundo.
Y en la España actual, ¡quién lo hubiese pensado nunca
contemplado nuestra historia!, el anterior pensamiento se ha vuelto del revés y
el Rey, tanto el actual Felipe VI, como su padre Juan Carlos I, son, con
diferencia, mucho mejores que la sociedad que representan. Y toda la clase
política, especialmente las izquierdas, son una pandilla de paletos sin arreglo
posible, que se creen algo y no son nada. Milagros de la incoherencia de los
tiempos presentes, ver hasta donde se puede llegar con demagogia, mentiras, desvergüenza y cara dura. En la España actual hasta la Presidencia y la Vicepresidencia de la Nación.
Se puede, festivamente pensar, que si algún día se
convirtiese España en una República su primera medida tendría que ser contratar
a la Casa Real inmediatamente para que ocupase la más Alta Magistratura de la
Nación. Y nos saldría bastante más caro por contrato, es un trabajo muy duro y muy mal pagado. No hay nadie, ni de lejos, que se acerque a la prudencia y al buen
juicio que han demostrado, en la España actual, en esta España cainita y
destructiva.
Y no hay nadie en España, ni en su presente ni en su pasado cercano, en ningún cargo, incluyendo Presidentes del Gobierno en ejercicio, que llame a quién llame en el Mundo al máximo nivel, sea atendido inmediatamente, excepto el Rey de España. Tal es su credibilidad internacional. Los políticos españoles, credibilidad ninguna. Ni siquiera en España. Ni siquiera tienen idiomas.
Y si tenéis alguna duda de lo que sois mirar el trato que hoy mismo os están dando en Europa. Podéis estafar y engañar a España, lo estáis haciendo en este sentido muy bien, pero parece que en Europa es mucho más difícil ya que os valora justo en lo que sois: nada. Y tiene que ser especialmente doloroso que sean precisamente los partidos socialistas europeos quienes peor os traten, os conocen mejor. Pero algo se conseguirá mendigando y escudándose en salvar al conjunto del sueño europeo, la UE, pero con freno y marcha atrás. Pero tranquilos la mendicidad se venderá como victoria. Ya que somos negados para la gestión hagamos propaganda, puede que así los tontos que nos votan lo sigan haciendo.
Y no hay nadie en España, ni en su presente ni en su pasado cercano, en ningún cargo, incluyendo Presidentes del Gobierno en ejercicio, que llame a quién llame en el Mundo al máximo nivel, sea atendido inmediatamente, excepto el Rey de España. Tal es su credibilidad internacional. Los políticos españoles, credibilidad ninguna. Ni siquiera en España. Ni siquiera tienen idiomas.
Y si tenéis alguna duda de lo que sois mirar el trato que hoy mismo os están dando en Europa. Podéis estafar y engañar a España, lo estáis haciendo en este sentido muy bien, pero parece que en Europa es mucho más difícil ya que os valora justo en lo que sois: nada. Y tiene que ser especialmente doloroso que sean precisamente los partidos socialistas europeos quienes peor os traten, os conocen mejor. Pero algo se conseguirá mendigando y escudándose en salvar al conjunto del sueño europeo, la UE, pero con freno y marcha atrás. Pero tranquilos la mendicidad se venderá como victoria. Ya que somos negados para la gestión hagamos propaganda, puede que así los tontos que nos votan lo sigan haciendo.
Y ya que estáis intentado poner en la picota al Rey Emérito Don Juan Carlos I, quiero deciros que toda la clase política española desde la
transición hasta el día de hoy, en todo su conjunto, no sobrepasáis la suela de
su zapato en el servicio a los intereses de España, de su pueblo y del sistema
democrático, de llevar a la Nación al siglo XXI. Vosotros solo sois
personajillos que habéis hallado acomodo para vivir, robar y prosperar en la
Política sin que halláis aportado nada importante a la Nación, solo sois hienas
escupiendo al cielo mientras corrompéis todo lo que tocáis. Todas las desventuras que asolan hoy a España se deben a la clase política, a vosotros, y lo sabéis.
Y a niveles de preparación sois un conjunto patético frente a Felipe VI, sin idiomas, con titulaciones falsificadas, basuras intelectuales, que no tendríais que haber salido de Vallecas jamás. Y no sabéis cuanto me jode, que no siendo monárquico y siendo un aprendiz de filósofo, por tanto quien duda de todo y de todos por sistema, tenga que decir lo que estoy diciendo y tener recordaros la nada intelectual y moral que sois en conjunto: solo sois una desilusión y una desgracia nacional.
Y a niveles de preparación sois un conjunto patético frente a Felipe VI, sin idiomas, con titulaciones falsificadas, basuras intelectuales, que no tendríais que haber salido de Vallecas jamás. Y no sabéis cuanto me jode, que no siendo monárquico y siendo un aprendiz de filósofo, por tanto quien duda de todo y de todos por sistema, tenga que decir lo que estoy diciendo y tener recordaros la nada intelectual y moral que sois en conjunto: solo sois una desilusión y una desgracia nacional.
Y ya que el escándalo es una pretendida comisión del
Rey Juan Carlos I en el contrato del AVE en Arabia Inaudita, yo que algo me
he movido, no mucho, en el tema internacional os voy a rebelar un secreto: que en
muchos países del mundo, en muchísimos, en casi todos, sí no hay reparto de comisiones no hay
contrato. Pero ¡que petulante soy! dando lecciones sobre comisiones, de esta materia sabéis de sobra, si alguien sabe de comisiones ilegales sois precisamente vosotros, en eso todos los políticos sois maestros ¿sabremos nosotros algún día cuantas comisiones habéis cobrado en esta crisis sobre la muerte de tantos españoles con los contratos de material sanitario?
Conseguir ese contrato por el que pugnaban las
principales naciones del mundo es obra absoluta y completa del prestigio del
Rey Emérito en esa parte del mundo. Y grabaros una cosa en vuestras estúpidas
cabecitas, vosotros los que sacáis todo lo que podéis y lo que no podéis y no
aportáis nada: solo con ese contrato, solo con ese, el Rey Juan Carlos ha
devuelto a España todos los costos de la Casa Real desde la Transición ¿Qué
habéis aportado vosotros salvo llenaros los bolsillos, un festín de gasto irresponsable clientelar, homicidios, ruina de la
Nación, casoplón en Galapagar, ¡hay que joderse!, y viajes en avión a
Valladolid, ¡hay que joderse! No se puede ser más catetos ni entrenando.
Los profetas bíblicos siempre me han parecido
personajes excesivos, tonantes e iracundos, plenos de indignación y rencor, nadas vociferantes, tal como yo soy hoy, pero cargados de razón, tal como yo soy hoy. Me doy lástima solo de pensarlo.
Viendo el panorama español, para mi vergüenza, hoy los entiendo sobradamente y me gustaría maldecir a estos malditos con las más duras palabras, lo que no haré por pudor intelectual pero si preguntaré ¿Podéis dormir por las noches sin la compañía de los miles de muertos en soledad y abandono que habéis causado? ¿Podéis miraros en un espejo sin vomitar? ¿Y si hubiesen sido vuestros padres y vuestro hijos los muertos en la soledad y en el desamparo? ¿Podéis mirar a vuestros hijos sin pensar en los huérfanos provocados? ¿Podéis mirar a vuestros padres sin pensar en los hijos que han perdido a sus padres sin poderse ni siquiera despedirse? ¿Merece la pena la vanidad del Poder a este precio? ¿Podéis vivir sin pensar en el suicidio? Si la contestación es que si podéis, solo a una de esas preguntas, solo a una, ya queda hecho vuestro retrato y tenéis garantizado vuestro puesto destacado en la Historia Universal de la Infamia. Borges os hubiese hecho un cuento a la medida.
Viendo el panorama español, para mi vergüenza, hoy los entiendo sobradamente y me gustaría maldecir a estos malditos con las más duras palabras, lo que no haré por pudor intelectual pero si preguntaré ¿Podéis dormir por las noches sin la compañía de los miles de muertos en soledad y abandono que habéis causado? ¿Podéis miraros en un espejo sin vomitar? ¿Y si hubiesen sido vuestros padres y vuestro hijos los muertos en la soledad y en el desamparo? ¿Podéis mirar a vuestros hijos sin pensar en los huérfanos provocados? ¿Podéis mirar a vuestros padres sin pensar en los hijos que han perdido a sus padres sin poderse ni siquiera despedirse? ¿Merece la pena la vanidad del Poder a este precio? ¿Podéis vivir sin pensar en el suicidio? Si la contestación es que si podéis, solo a una de esas preguntas, solo a una, ya queda hecho vuestro
Pero
volvamos a otros temas serios y sigo citándome. Los Partidos Políticos y los altos
funcionarios se han adueñado de la realidad y de la expresión política y
ciudadana en un duopolio que no admite competencias. Son en esencia unas
sofisticadas máquinas de poder y de compromiso, el lugar donde se producen los
“arreglos”, las vergüenzas tapadas y manipuladas de una corrupción galopante,
los beneficios para acallar críticas, el clientelismo de pagos al contado como
la mejor y la única ideología, te voto en función de lo que me des, la inmensa
oficina de empleo de los fieles y los paniaguados, los acuerdos secretos, los
repartos económicos y de poder y de influencia judicial para que sus robos y
crímenes queden impunes, los delicados equilibrios de los intereses
enfrentados, la cocina que prepara la realidad que después nos es servida por
camareros uniformados y robotizados según la lógica de sus intereses, vendidos
a la ciudadanía como un producto de consumo, publicitado, etiquetado, pulido y
empaquetado, y que como en todas las organizaciones pasa primero por su
preeminencia y supervivencia en el ejercicio del Poder y después por ocupar
todo el espacio posible, siendo más que evidente que su última ocupación es ser
camino de expresión social y su primera defender su privilegiada forma de vida
en la administración interesada del cuantioso poder e innumerables recursos
públicos de los que disponen, la voraz e insaciable clase política capaces de
venderse ellos mismos, capaces de vender a su madre, si es el pago que se
necesita para mantenerse en el Poder. Y de la Patria considerada como madre
común mejor ni hablar: la han puesto a trabajar de puta. "Y a chufla lo toma la gente, y a mi me da mucha pena, ...estamos cantando por bulerías, mientras vivimos muriendo,.....estas son licencias sobre las coplas del Piyayo, aquel calé retostao de vida esforzada, sufriente y destrozada al que España se va pareciendo.
De futuro
seguramente, casi ya de presente, los peores enemigos de las democracias y
sobre todo de la Libertad ciudadana lo serán los Partidos Políticos, sobre todo
debido a que la elección de sus representantes no se hace en función de su
capacidad y moralidad, se hace en función de la obediencia a la estructura, de
tal modo que al fin solo prosperan los dóciles, acomodaticios y serviciales. La Política y los puestos importantes solo para sicarios. La
perversión recurrente de las autocracias con distintos disfraces. El problema
hoy son los políticos profesionales. No están a la altura de lo que las sociedades modernas necesitan. Ni son capaces de pensar ni son capaces de gestionar.
Y pocas
defensas tiene la ciudadanía en las sociedades democráticas frente a la
colonización abusiva de los Partidos Políticos de todos los recursos del Poder.
La primera podría ser la permeabilidad democrática de todos los puestos
dirigentes en votación de todos los afiliados al Partido al menos cada dos años
para poder controlar las desviaciones que puedan producirse y poder controlar
eficazmente a sus representantes en la vida pública e incluso poder exigir su
renuncia a sus cargos de manera inmediata y no voluntaria. No se conseguirá nunca. Antes perder la vida que el cargo. Aquí no hemos llegado para servir, hemos llegado para servirnos.
Y otro muy
importante sería evitar que la máxima representación de Estado sea ocupada por
el representante de un Partido Político, lo que solo se consigue en las
Monarquías Constitucionales pero muy escasamente ya que exceptuando la
representación pocos recursos de arbitraje quedan para moderar las feroces
luchas partidistas y deben contemplar impávidos incluso la destrucción de la
concordia nacional e incluso de la Nación sin poder intervenir decisivamente.
La mejor
defensa de las monarquías es que contemplando el plantel de los políticos del
mundo imaginemos por un momento que puedan convertirse en la máxima autoridad
del Estado con o sin remoción, su figura pública, la encarnación de la Nación. Trump por ejemplo. O Maduro, un orangután con guayabera tropical. ¡Qué pesadilla! En España tuvimos incluso como primera autoridad electa a la
familia Monster que enviamos de visita de Estado a la Casa Blanca. Inolvidable.
¡Qué fotografías conmemorativas para la Eternidad y para el desprestigio de
España! ¿Os imagináis a Zapatero y a su familia encarnando a España? ¿O al Coletas?
La Monarquía
Constitucional fue en su momento un gran logro social, convertir la Monarquía
en el símbolo de la unidad nacional y reducir sus atribuciones prácticamente
solo a la representación del Estado, ser custodio y ¿garante?, -¿Sí? ¿Cómo?-, de la legalidad y a
escasas y muy tasadas labores de arbitraje. Y los temas de mayor importancia a
tratar con la mayor discreción entre bambalinas, viendo, sin poder hacer nada,
que su sociedad camina hacia el abismo empujada por políticos enloquecidos y
borrachos de poder y carentes, no ya del patriotismo exigible, carentes del más
mínimo sentido común. Que además juran o prometen en falso la defensa de la Constitución.
Puede que
esta reducción de prerrogativas reales sea un error y debamos devolver, sobre
todo en el caso español, mayores capacidades de decisión y de arbitraje, aun
cuando fuera de manera temporal, ante la aparición de estos populismos
demagógicos sean de derechas o de izquierdas, que como ya dictaminó Aristóteles
degradan siempre la Democracia que termina siempre en demagogia y corrupción
-“enjambre de ruidosos camorristas. Sócrates”-, dispuestos a destruir las bases
mínimas de concordia social y totalmente ajenos a comportamientos sociales
racionales, ya que si la Democracia no es moral y no es racional no es Democracia. El
Rey debería de ser la figura operante con atribuciones para liderar la vuelta a
la racionalidad necesaria en estos casos. Es el único con autoridad moral
suficiente para decir basta. Un poder de veto tajante sobre iniciativas legislativas gubernamentales disparatadas podría ser una solución.
Voy a
terminar con un par de comentarios por los que me pondrán a parir y seguramente
con razón, de un lado y del otro. Pero confieso que, quién me lo iba a decir,
que a mi edad he descubierto la bondad del pensamiento aragonés, reñido con la
cortesía, de decir la verdad de lo que pienso haga falta o no. Me gusta escribir "cual suele el pueblo fablar con su vecino. G. de Berceo", me inclino más por Quevedo que por Góngora, pero tal vez un
par de cultismos sean más apropiados en este contexto. Dice Apolonio de Tiana que “mentir era
propio de siervos y decir la verdad, propio de hombres libres. Es la primera y
fundamental característica de la virtud”. Y, su referencia intelectual,
Aristóteles, tiene un pensamiento muy preciso al respecto y dice “es obligación
de la magnanimidad odiar y amar abiertamente, juzgar, hablar con toda
franqueza, y, en comparación con la verdad no hacer caso de la aprobación o
reprobación ajena” Me quiero referir a los ahorros suizos del Rey Emérito en
Suiza y tengo que decir que me parecen muy bien que los tenga. Me explico.
Don Juan
Carlos conoció desde muy joven la miserable carga de una Casa Real en el
exilio, con pocos medios, prácticamente en la miseria. Y las humillaciones que
tal situación acarrea como pago de supervivencia de las obligaciones de la
nómina real de deberes de representatividad incluso en el exilio y a los deberes de la Casa y a la memoria
histórica. Para los que no lo recuerden Alfonso XIII, su abuelo, salió de un
modo injustificadamente precipitado de España y creo recordar que todos sus
bienes fueron expropiados sin compensación ninguna, por lo que se, todos los
bienes reales pasaron a Patrimonio Nacional.
De modo que
viendo el giro de los tiempos y las obligaciones históricas que continúan igual
de exigentes tanto en el reinado activo como en el exilio, -tal como hoy su cuñado el Rey Constantino II de Grecia exiliado en Londres-, parece prudente que
el padre vivo de la Dinastía tome las precauciones adecuadas para garantizar en
cualquier situación la viabilidad histórica de la Casa Real.
Y Don Juan
Carlos, si lo ha hecho, -que está por demostrar-, ha hecho en mi criterio lo que
tenía el deber de hacer. Y lo ha hecho no robando a la Nación, no con
comisiones sobre contratos públicos como se han financiado todos los Partidos
Políticos, que es robar a la Nación ya que el precio aumenta y lo pagamos entre
todos, con la desvergüenza de los catalanes en primera línea, -3.000 millones solo una familia-,
pero todos en la misma fila con financiaciones irregulares, sindicatos
incluidos y miles de absurdos chiringuitos subvencionados, robando ayudas a los parados concedidas por Europa para la región de
España con más parados, 1.000 millones para coca y putas, y eso un partido que
dice defender a los trabajadores, ¿Qué haría el PSOE si quisiera maltratarlos?, en fin,
España, en unos límites que solo provocan vergüenza. O tal vez defienden a los
trabajadores del narcotráfico -¿Recuerdan Venezuela?- y a las obreras del sexo.
Pues no, Don
Juan Carlos no ha recurrido al robo como los que le critican, tampoco a
reclamar a Patrimonio el Patrimonio Real expropiado ¿Qué tal el Prado o las Colecciones
Reales? ¿Tal vez los Stradivarius? ¿Y los Reales Sitios? Pero para que seguir. Don Juan Carlos, de ser
ciertas las acusaciones, ha obtenido su patrimonio secreto de ayudas de otros
Reyes y consiguiendo engrandecer la presencia industrial y comercial de España
en el mundo. Démosle las gracias. En estos tiempos de miseria hacia donde vamos
¿no sería más inteligente asociar al Rey Emérito al esfuerzo comercial exterior y que
nos ayudara y que siguiera él acrecentando sus ahorros? ¿Alguien en el actual panorama español lo podría hacer mejor? ¿Trabajar mejor para España? ¿Quién?
Por cierto, para un Rey que ha servido muy bien a la Nación ¿no tiene ni siquiera el derecho a la presunción de inocencia? ¿Me equivoco al pensar que son absolutamente miserables los que intentan, con tanto ímpetu, condenarle y matarle política y socialmente, hoy mismo, sin condena previa? Un Derecho fundamental ¿se le puede negar a él, al primer español? ¡Qué desvergüenza!
Por cierto, para un Rey que ha servido muy bien a la Nación ¿no tiene ni siquiera el derecho a la presunción de inocencia? ¿Me equivoco al pensar que son absolutamente miserables los que intentan, con tanto ímpetu, condenarle y matarle política y socialmente, hoy mismo, sin condena previa? Un Derecho fundamental ¿se le puede negar a él, al primer español? ¡Qué desvergüenza!
Y tengo que
decir, ya que si no reviento, que esta panda de estafadores que esté exigiendo a
Felipe VI, un Rey impecable, que mate socialmente a su padre es lo más
miserable que puedan contemplar los tiempos. Como ya me estoy acostumbrando de
escribir para que nadie me lea, y a predicar en el desierto, y no me importa, pero por sí el Rey
me leyera, un consejo: No lo haga, no desacredite a su padre, no lo merece ni como padre ni como Rey y
menos que S.M. les haga el juego de desacreditar a la Monarquía, ese es su juego
de fondo, no es su padre, es la Institución. Quieren colocarle a su misma altura
de deslealtad. Es propio de las condiciones humanas miserables el ya que no pueden ascender intentar rebajar a todos a su nivel. "Conoce a un resentido y habrás conocido a un miserable". Tiene S.M. hoy muchos a elegir en el Gobierno.
Mándelos
directamente a la mierda, muy diplomáticamente pero que se entienda claramente, el pueblo lo agradecerá, el tema se está investigando, los que saben de estos
temas opinan que tiene muy poco
recorrido judicial y el tiempo dirá. Mientras, salga Su Majestad de este juego de tahúres y golfos.
Podríamos decirle al Sr. Iglesias que rechace pública y frontalmente a su padre
por un delito infinitamente más grave, el que su padre haya pertenecido, según la
propia declaración del Vicepresidente, apodado el Coletas, a una organización
terrorista que asesinó a personas. También su abuelo fue condenado a muerte por crímenes de guerra por un Tribunal. Y se beneficio de un indulto de Francos suplicada en la carta más miserable y zalamera que yo haya visto jamás. En un juicio ponderado parece más adecuado
que el sr. Iglesias realice este tipo de
acciones contra su señor padre y su señor abuelo ¿terrorista? ¿criminal?-dixit- al que Su Majestad participe en un Auto Sacramental
más parecido a un aquelarre de necios, ególatras y resentidos.
Como no
tengo pruebas, dejar que os cuente un cuento que os gustará. Tomarlo como un
cuento para no dormir, no tengo ni edad ni tiempo para demandas. En los tiempos en los que la crisis turística me obligo a salir de Marbella a intentar encontrar
fortuna, sin ninguna fortuna en el intento pero muy trabajada la ruina, eso si, tengo que decirlo, en Madrid, tuve la oportunidad de
frecuentar muchos de los más famosos mentideros capitalinos de la época, algunos de ellos de bastante
altura, de mucha altura, en algunos casos de casi máxima altura, pero no tengo pruebas de nada, solo buena memoria, todos los temas de la máxima la importancia de entonces tratados en conversaciones distendidas -escucho muy bien y hasta parece que entiendo, como los búhos- pero de fiabilidad dudosa en el momento, pero casi
siempre al final ciertas. Y os aseguro que muchas de ellas parecía imposibles dos meses antes de que sucedieran inexorablemente con la precisión de un reloj suizo. De manera que creo en las conspiraciones, lo se por haberlas vivido muy de cerca y algunas realmente graves. Los hechos confirmaban prácticamente siempre los temas que conocía previamente. En una de ellas, con
todo lujo de detalles, por persona que tenía motivos para conocerlo, me contaron lo siguiente.
Al poco del
intento del golpe de Tejero algunos altos responsable políticos empezaron a
pensar y a preocuparse de su situación personal y política si el golpe hubiese
tenido éxito -Tangencial ¿Alguien supo que carga llevaban la flotilla de barcos
de Goicoetxea cuando huyó de España la noche de Tejero o para quién era el contenido de las maletas de Delcy Rodríguez? no me acuerdo muy bien ¿Había un ministro garantizando el contrabando impune y que tales maletas saliesen con destino y destinatario español desconocido?- y claro se llenaron de preocupación.
Cuentan que se decidió abrir una cuenta en Suiza para cubrir esa hipotética situación, un seguro bastante elevado, unos 60.000 millones de pesetas de la época ¿Cuánto en euros al día de hoy?, ¿unos 2-3.000 millones? , con dos firmas de acceso y disposición de los fondos individualmente sin otro control que su propio honor. Ya se sabe, el conocido honor entre ladrones. Como todo el mundo puede entender no podía figurar a nombre de ninguna organización. Bueno, la democracia en España parece consolidada, parece que ese seguro ya no es necesario, la cuenta era personal. De ser cierto mi cuento ¿Alguien sabe dónde coño está el dinero? ¿Sabe alguien si se devolverá a la Nación? Misterios. ¿Alguien cree que aquí se devuelve algo de lo robado?
Y despedida. Me aburro. Recordemos algo que nos dejó la Monarquía para la grandeza de España, no por la colecciones reales base del Museo de Prado que eso es hasta demasiado, por un solo cuadro demos las gracias ya que la Monarquía adoptó como Pintor Real a Velázquez y lo convirtió en inmortal y él inmortalizó a la Familia Real de Felipe IV con Las Meninas. Diego Rodríguez de Silva y Velázquez, el que convertía los monstruos en seres humanos, -discutible con Góngora, yo tampoco le aprecio demasiado, muy pesado-, al contrario de mi amado Goya que convertía a los seres humanos en monstruos.
Yo siempre he creído que si yo hubiese sido Carlos IV me hubiese costado mucho no haber mandado fusilarle cuando vi por primera vez el retrato de mi familia: no se puede ser más cruel. En ese cuadro se anticipa claramente toda la Época Negra, cuando dejó de pintar cuerpos y empezó a pintar almas y, sobre todo, vicios y vacuidad mental.
Y por pura vanidad de apellidos pongo también el Juicio Final de Francisco de Pacheco, su maestro, su valedor y su suegro, aunque a mi me emociona más por su importancia histórica un cuadro suyo que está en la Catedral de Sevilla y que representa la entrega de las llaves de la ciudad a San Fernando III, Rey de Castilla, del que su hijo Alfonso X, el Sabio, dejó escritas estas hermosas palabras "todas esta vertudes, et gracias, et bondades puso Dios en mi Rey Don Fernando". Mi padre.
Y para daros un poco de virilidad castrense y unas gotas de amor a España traigo de mi recuerdo lejano de sufrido soldado de España en Regulares donde, con mucha nostalgia, lo cantábamos con frecuencia "allá por la tierra mora, allá por tierra africana" y nada me parece mejor que el pasodoble Banderita de Las Corsarias. Disfrutarlo.
Cuentan que se decidió abrir una cuenta en Suiza para cubrir esa hipotética situación, un seguro bastante elevado, unos 60.000 millones de pesetas de la época ¿Cuánto en euros al día de hoy?, ¿unos 2-3.000 millones? , con dos firmas de acceso y disposición de los fondos individualmente sin otro control que su propio honor. Ya se sabe, el conocido honor entre ladrones. Como todo el mundo puede entender no podía figurar a nombre de ninguna organización. Bueno, la democracia en España parece consolidada, parece que ese seguro ya no es necesario, la cuenta era personal. De ser cierto mi cuento ¿Alguien sabe dónde coño está el dinero? ¿Sabe alguien si se devolverá a la Nación? Misterios. ¿Alguien cree que aquí se devuelve algo de lo robado?
Y despedida. Me aburro. Recordemos algo que nos dejó la Monarquía para la grandeza de España, no por la colecciones reales base del Museo de Prado que eso es hasta demasiado, por un solo cuadro demos las gracias ya que la Monarquía adoptó como Pintor Real a Velázquez y lo convirtió en inmortal y él inmortalizó a la Familia Real de Felipe IV con Las Meninas. Diego Rodríguez de Silva y Velázquez, el que convertía los monstruos en seres humanos, -discutible con Góngora, yo tampoco le aprecio demasiado, muy pesado-, al contrario de mi amado Goya que convertía a los seres humanos en monstruos.
Yo siempre he creído que si yo hubiese sido Carlos IV me hubiese costado mucho no haber mandado fusilarle cuando vi por primera vez el retrato de mi familia: no se puede ser más cruel. En ese cuadro se anticipa claramente toda la Época Negra, cuando dejó de pintar cuerpos y empezó a pintar almas y, sobre todo, vicios y vacuidad mental.
Y por pura vanidad de apellidos pongo también el Juicio Final de Francisco de Pacheco, su maestro, su valedor y su suegro, aunque a mi me emociona más por su importancia histórica un cuadro suyo que está en la Catedral de Sevilla y que representa la entrega de las llaves de la ciudad a San Fernando III, Rey de Castilla, del que su hijo Alfonso X, el Sabio, dejó escritas estas hermosas palabras "todas esta vertudes, et gracias, et bondades puso Dios en mi Rey Don Fernando". Mi padre.
Y para daros un poco de virilidad castrense y unas gotas de amor a España traigo de mi recuerdo lejano de sufrido soldado de España en Regulares donde, con mucha nostalgia, lo cantábamos con frecuencia "allá por la tierra mora, allá por tierra africana" y nada me parece mejor que el pasodoble Banderita de Las Corsarias. Disfrutarlo.
La familia de Carlos IV. Goya
Francisco de Pacheco.
Comentarios
Publicar un comentario