Aseguro que cada vez
que termino un comentario político sobre la situación en España en estos últimos tiempos, me prometo a
mí mismo que es el último que hago. Creo que un país que ha votado a esta pandilla
de facinerosos a los que se ha votado, se merece exactamente lo que le está
sucediendo y me viene al recuerdo una frase de Einstein que más o menos dice
que la prueba de la locura es “Hacer una y otra vez lo mismo y pretender que
los resultados sean distintos”.
Tiene hasta su gracia,
macabra eso sí, que teniéndolo todo el mundo claro, cristalino oiga vd. que
dice “el Pablete”, que el dúo tragicómico, los nuevos payasos de la tele pero
sin gracia ninguna, son de facto unos homicidas por negligencia grave y
culposa, unos trampas, unos mentirosos compulsivos, una auténtico peligro para
España, siga alguien con un mínimo criterio moral haciéndoles caso, obedeciendo
sus órdenes, que el Ministerio del Interior esté siendo el laboratorio de la
nueva Gestapo, que el CIS de Tezanos se haya metaformeado con impudicia en el
Ministerio de Goebbels, que la Guardia Civil esté protegiendo, en contra de
derechos fundamentales, la comodidad de la siesta de un individuo que hace
cuatro días decía disfrutar de las agresiones con lesiones graves a la Policía,
socio de los criminales de ETA y de los delincuentes catalanes, sirviente de un
narco-estado y cómplice de los excesos de un estado islámico, que sigan
asistiendo a sus reuniones y obedeciendo sus órdenes, que sabiendo que éstos si
son los auténticos tahúres de Mississippi, -cosecha de Guerra-, que siempre
roban, trampean y estafan, con cuatro barajas en la manga sin ningún disimulo,
haya algún gilipollas que siga sentándose a su mesa para ser engañado en
cualquier negociación o que merezca algún comentario por despreciativo que sea
por parte de periodistas serios. ¿Es que acaso nos gusta que nos roben, que nos
maten, que nos estafen? ¿No es momento ya de dar la espalda al Gobierno como
han hecho los sanitarios belgas para mostrar su desprecio? ¿No es el momento ya
de no hacerles ni puto caso en ningún orden? Vaya, mandarlos directamente a la
mierda, la resistencia pasiva de Ghandi o la recomendación de Camus. “Ellos
mandan hoy porque tu obedeces.”
El Partido Socialista
ha sido un fracaso absoluto a lo largo de su historia en la gestión de la
realidad -con un interludio prometedor con Felipe González y Guerra, de una
social-democracia moderna y europea, aunque también se saldó con la ruina
económica de España como sucede siempre que han gobernado-, alcanzando la
cúspide de la infamia en el golpe de Estado del 34 y en el Frente Popular de 36
donde fueron los auténticos protagonistas junto con los comunistas, de un
Estado dirigido por ladrones y criminales, donde robaron todo lo que pudieron,
expoliaron y destruyeron la Nación y mataron sin compasión a la gente por los
horribles crímenes de ser de derechas o por la sospecha de que habían votado a
partidos de derechas, o por ir a misa los domingos según denuncias de los
porteros de las fincas o de ladrones interesados en los bienes de los
denunciados o por apellidarse de una determinada manera que sonaba a familias
adineradas. Y finalmente los dirigentes huyeron a un exilio dorado con el botín
de sus robos.
Cualquier país con un
poco de sentido común hubiese enterrado a comunistas y socialistas bajo una
montaña de desprecio y rechazo, en el basurero de la Historia exactamente como
han hecho los alemanes con los comunistas, salvo nosotros aquí, en esta España
de nuestros dolores, donde a base de mentir y volver a mentir, han conseguido
incluso una Ley de la Des-Memoria Histórica donde se consagra como delito el
contar la verdad de lo sucedido durante la Guerra In-Civil y el saqueo de la
Nación por exactamente los mismo partidos políticos que hoy gobiernan en España
y que van camino del mismo Frente Popular que provocó la confrontación y la
muerte entre hermanos y que si seguimos por este camino todo parece indicar que
tendremos resultados de confrontación social como los que tuvimos. Están
sembrando odios y ya se sabe de sobra cual puede ser su cosecha.
Todo es tan viejo, tan
de ignorantes y aprendices de criminales, que dedicarles solo un minuto me
fatiga y me aburre a límites difíciles de explicar, ya que es hablar de
retrasaditos que tendrían que dedicarse a labores a la altura de su capacidad
mental, a dependientes del Corte Inglés, y eso con suerte, -en cualquier
actividad privada Pedro Sánchez hubiese sido despedido en el minuto uno por
falsificar su historial académico y por la gestión de esta crisis que nos está
costando decenas de miles de muertos y que está arrasando España, de lo que es
culpable absolutamente, y un chisgarabís con ínfulas de matón de barrio de
extrarradio que además no tiene ni media hostia, que él mismo se define como un
psicópata, sería el hazmerreír en cualquier país del mundo- repito, que simplemente hacer un comentario sobre el
basurero mental y moral que son tan en la superficie, que pensar quienes pueden
ser tan gilipollas que les hayan podido votar y darles el Gobierno de un
importante país europeo en el siglo XXI te hace llegar a la conclusión
inevitable de que nos merecemos exactamente lo que tenemos.
Balzac
ya que nos dijo que “el problema de la Democracia es que los votos de cuentan
pero no se pesan” y como en toda sociedad humana actual el número de
ignorantes, resentidos y gentes que quieren vivir del esfuerzo ajeno, es
siempre superior al de los ilustrados, esforzados y patriotas, el resultado
siempre será el mismo, el triunfo de la demagogia y del populismo, tal como
Aristóteles vaticinó: “La Democracia deviene inevitablemente en demagogia y en corrupción”.
En
España es más que evidente y si se mira con atención, salvo preclaras
excepciones, sucede en general en todo el mundo en estos momentos, ya que Stuart Mill nos dejó un
pensamiento que no ha sido, como debiera, de obligada asunción por parte de las
sociedades “Al sufragio universal debe preceder la instrucción universal”. Ya
que la dicotomía es cada vez más evidente: no puede haber democracia que
funcione entre extremadamente desiguales, lo que nos lleva o a la igualación
del voto mediante la educación medida y comprobable o al distinto peso del voto en función de otros
muchos factores, sobre todos ellos, el
educativo. Sobre este tema tengo bastantes páginas escritas en mi libro
Humanitas et Universalitas, no me extiendo más aquí.
A
lo largo de mi vida he tenido, por mi enorme afición a la lectura a lo largo de
más de 70 años, la fortuna de haber mantenido una profunda relación con las
mejores mentes que la Humanidad ha producido a lo largo de la Historia con la
sola limitación de mi capacidad para poder aprender algo de ellos, la severa
frontera de la incapacidad propia. Pero tengo una cabeza muy bien ejercitada
para distinguir la calidad. Y para distinguir con claridad la diferencia entre
la calidad y la mierda. Y vuelvo otra vez a repetir que el gobierno español
actual ha invertido el don de Midas: todo lo que toca lo convierte en mierda. Y
esto no tiene arreglo posible con los protagonistas que tienen. Cabezas llenas
de mierda solo pueden producir mierda. Y a eso se dedican.
He
disfrutado, y mucho, de la benevolente amistad vicaria de, en mi criterio, la
mejor cabeza pensante de España, con diferencia. Y como es natural en esta
tierra cainita está llegando al fin de sus días sin que las multitudes, sobre
todo de políticos, no estén de rodillas
a la puerta de su casa bebiendo y disfrutando la enorme riqueza de su
sabiduría. Si lo hubieran hecho España estaría hoy salvada.
Me
refiero a Ángel Cristóbal Montes, catedrático de Derecho Civil en Zaragoza,
anteriormente catedrático de la Central de Venezuela y de la Universidad
Católica Andrés Bello, autor de más de una veintena de libros sobre su materia
que han ayudado y siguen ayudando a formar a una legión de juristas, parlamentario constituyente en la España de
la transición, autor de una decena de libros políticos y de artículos políticos
por miles, Presidente de la Cortes de Aragón y que en estos últimos años como
catedrático emérito sigue impartiendo clases de Filosofía, regalándonos cada
año -a mí literalmente y dedicado- un libro de meditaciones filosóficas de
enorme profundidad donde tanto hemos coincidido, y en mi caso aprendido de él y
al que tanto cito en mi obra, sobre todo cuando hablo de Política y, sobre
todo, de Filosofía, al final lo único auténticamente importante. “La Ciencia de
todas las ciencias y de sí misma”.
Cercano
a los ochenta, se atrevió a escribir y publicar “Repensar a Heráclito”, sobre el más enigmático de los filósofos
clásicos, apelado El Oscuro por su dificultad, en el origen del pensamiento
racional junto con Parménides, en el inicio de la ilustración presocrática
jónica donde se inicia la Dialéctica, la Metafísica y la Ética, el que con
tanto vigor anunció la transformación y la evolución de todo. “Ningún hombre
puede cruzar el mismo rio dos veces, porque ni el hombre ni el agua serán los
mismos”. ¡Trabajo meritorio donde los haya, entre tantos otros! Saludos
maestro.
En
nuestras charlas telefónicas interminables, menos numerosas de lo que me
gustaría ya que no quiero restarle tiempo a sus ocupaciones, me gusta bromear
con él para siempre decirle en conclusión que sus grandes problemas como
filósofo y como político han sido no haber nacido en Alemania para atreverse a
hablar y escribir sobre Filosofía “De Filosofía solo se puede hablar en
alemán”, o al menos no estar exiliado en USA para publicar en inglés desde
alguna Universidad de prestigio, España no es un buen país para el pensamiento
y menos para los pensadores.
Y como político tener la peor cualidad: la honradez y el pensamiento propio, la coherencia intelectual, ya que esas cualidades le separaban radicalmente de la práctica de la política, ya que la maquinaria de los Partidos Políticos no quieren, en ningún caso, gente preparada y honesta, quieren tontos acomodaticios, sicarios, a las órdenes del Partido y complacidos cómplices y colaboradores en la corrupción generalizada de la actividad política: ¡a robar que son tres días!. Creo que fue Nietzsche quién nos dejó dicho que “Una persona inteligente nunca encontrará acomodo en ningún Partido Político, ya que inevitablemente sobrepasará sus límites y la disciplina del pensamiento ortodoxo”. Pido disculpas, creo que me he adornado demasiado en la cita, es más corta.
Y como político tener la peor cualidad: la honradez y el pensamiento propio, la coherencia intelectual, ya que esas cualidades le separaban radicalmente de la práctica de la política, ya que la maquinaria de los Partidos Políticos no quieren, en ningún caso, gente preparada y honesta, quieren tontos acomodaticios, sicarios, a las órdenes del Partido y complacidos cómplices y colaboradores en la corrupción generalizada de la actividad política: ¡a robar que son tres días!. Creo que fue Nietzsche quién nos dejó dicho que “Una persona inteligente nunca encontrará acomodo en ningún Partido Político, ya que inevitablemente sobrepasará sus límites y la disciplina del pensamiento ortodoxo”. Pido disculpas, creo que me he adornado demasiado en la cita, es más corta.
Con
respecto a la evolución de la situación de la democracia española coincidíamos
en los sucesivos análisis que él propuso hace ya muchísimos años, en 1993, en
su libro “La Democracia en España ¿sobrevivirá?”, pregunta que contestó con “La
Democracia en España no ha sobrevivido” en 2013 y finaliza su trilogía con su
demoledor “La incapacidad política española” en 2019.
De
manera que yo no puedo decir que la situación española me pille de sorpresa, ya
que incluso mis presagios desde el principio eran menos compasivos y mucho más
pesimistas que los suyos, a pesar que de ser los suyos en articulación
intelectual mucho mejor desarrollados que los míos ya que tiene un bagaje de
práctica política española a distancias siderales de los míos que jamás me he
dedicado a la política y mi temario es la Humanidad y los temas políticos
locales me producen poco interés, intento ser más generalista, excepción hecha
ahora por la locura angustiosa que estamos viviendo.
Para
bien poco ha servido el encomiable trabajo de este aragonés ilustre que tendría
que haber sido un catecismo para las clase política y para la sociedad española
en general. Nos avisó con mucho tiempo de la deriva suicida de la política
española y no se le hizo caso. Así estamos al día de hoy.
Pero
creo que ninguno de los dos pudimos pensar en la enorme degradación de la vida
política y social a estos niveles de bajeza moral e intelectual, a esta
impudicia, a esta estafa continuada de nuestra vida social, a este homicidio de
decenas de miles de españoles, a esta desvergonzada mentira continuada y a esta
burla absurdamente consentida. Un humorista gráfico lo definió perfectamente.
“Entre grandes risas le dice el Presidente a su mujer: verás tu cuando se
enteren que ni siquiera me llamo Pedro”, gran risotada y la contestación “Les
dará igualllll”.
Este
silencio de los corderos del pueblo español, esto sí que era absolutamente
impensable, yo pensaba que teníamos otro brío, otro compromiso cívico. Y que
ninguna de las garantías de un, se supone, Estado de Derecho, moderno y
europeo, estén funcionado para apartar del Poder a estos desalmados, esto
también resulta increíble, la Corona callada -parece que no quiere enterarse el
Rey de que precisamente es él la pieza más importante a cazar en los deseos de
estos totalitarios que sueñan con la República, ¿el ejemplo de su bisabuelo no
le sirve de aviso?-, la Justicia maniatada, los Partidos Políticos en sus
particulares despropósitos camino del desastre,
las Organizaciones sociales atónitas y sin reacción, los grupos
mediáticos sin patriotismo ninguno solo fieles a la voz de su amo: el dinero,
los Sindicatos que tienen que estar viendo el desempleo, el hambre y la pobreza
para sus afiliados en un futuro inmediato pensando que como dicen ser de
izquierdas están inmovilizados para la protesta -habría que ver si el gobierno
hubiera sido de derechas, no hay pensamiento propio, solo ideología, aunque sea
contraria a lo que dicen representar- y todos los que les han votado sin querer
asumir su responsabilidad en la muerte de sus mayores, en la ruina que ese voto
irresponsable nos costará, a ellos mismos más que a nadie, malditos sean todos.
Me
comentaban ya hace algún tiempo la gracieta muy ofensiva de que los muy ricos
votaban a los socialistas ya que tenían garantizado el desastre económico del
que siempre sacaban provecho, ya que de las crisis los ricos siempre salen más
ricos y los pobres más pobres y los sueldos a la baja. Lo peor es que me lo
dijo un ejecutivo de nivel medio de derechas ya que quería comprar un piso y
pensaba que en la nueva crisis le saldría más barato si gobernaban los
socialistas que siempre nos llevan a la ruina.
Decía
Jefferson “Los dos
enemigos del pueblo son los criminales y el Gobierno, así que permítanos
restringir el segundo con las cadenas de la Constitución y así el segundo no se
convertirá en la versión legalizada del primero”. Pues esto es justamente lo
que tenemos en España hoy: la versión legalizada de un grupo de criminales que
están destruyendo la Nación entre el dejar hacer de la sociedad y sus distintas
organizaciones sociales. Los lloros a después no sirven: nos lo estamos ganando
a pulso. Hubo un tiempo que en España se habló, sotto voce, de las cloacas del
Estado, hoy el Estado entero es una cloaca.
Y Churchill
nos dejó dicho que el mayor alegato contra el sistema democrático era pulsar
las opiniones de un votante medio de cualquier partido. En España es
innecesario, está a la vista, si esta panda de indocumentados, estafadores y criminales
está por votación libre en el Gobierno de la Nación, solo cabe una conclusión:
En España el sistema democrático y el Estado de Derecho están muertos. Estamos
ante el fracaso histórico de España.
La clase
política española está amortizada: deberemos empezar desde cero. En un trabajo
anterior ya adelanté que teníamos que repensar España al completo. Una sociedad
moderna no necesita activistas políticos, necesita gestores, científicos y
pensadores. Y los políticos actuales ni tienen capacidad para pensar ni tienen
preparación para gestionar, y por supuesto, todos son de letras, para el blablablá
y para dejar constancia de ser todos, como máximo, mala imitación de Fray
Gerundio de Campazas, bastante más zotes que el propio Zote.
Y dado que
ya he citado a Albert Camus, me despido con un doble grito desesperado suyo:
“Hay una ambición que deberían tener todos los escritores: ser testigo y gritar
cada vez que se pueda y en la medida de nuestro talento por aquellos que se
hallan en la servidumbre” o cuando nos encaminan hacia ella, cuando intentar
robarnos la libertad, ya que “si un hombre fracasa en conciliar la Justicia y
la Libertad, en todo ha fracasado”. ¿Hay alguien hoy en España que crea que
tenemos Justicia y Libertad? Si la respuesta es negativa, como yo creo, España
ha fracasado como Nación. Saque Vd. mismo las conclusiones.
Concluyo. Cuando
pienso en las víctimas españolas de esta pandemia, las imágenes mentales que me
aterrorizan, las protagonistas de mis pesadillas, son las residencias de
ancianos, el pavor de la soledad y de la falta de ayuda, ni siquiera el consuelo
de sus hijos en el adiós a su vida, incluso a veces no admitidos en urgencias
hospitalarias, abandonados a su suerte
por Pablo Iglesias, el indigno, el responsable máximo de las residencias, el
cobarde que no se ha atrevido a visitar ninguna, el insensible al dolor ajeno
que ha permitido enterrar a nuestros
mayores en soledad y abandono, como si fuesen basura camino del vertedero,
muchas muertes sin contabilizar siquiera y sin dar el pésame a las familias,
miserable. Puede felicitarse por su inacción, por primera vez el número de
pensionistas y el costo de las pensiones ha bajado.
Y para
escenificar tanto dolor solo se me ocurre aportar la obra maestra del dolor y el desamparo, El triunfo de la
Muerte, de Pieter Bruegel, el Viejo, al que acompaño con el Dies Irae, de la
Misa de Difuntos, en canto gregoriano,
todos estos dolores tan intensos que te llegan a los hondones del alma, a esos
hondones del alma a los que con frecuencia se refiere mi amigo Ángel Cristóbal
Montes.
Dies Irae. Gregoriano. Misa
de Difuntos.
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